Ventana Europea nº 119

ENTRE C ULTURAS 26 VENTANA EUROPEA Diciembre 2019 > L a palabra “diáspora” es de origen griego y es fruto de la suma de dos componen- tes: el prefijo “dia”, que se puede tra- ducir como “a través de”, y el sustan- tivo “spora”, que significa “semilla” o “de siembra”. Así pues, la palabra “diaspora” se refiere a la dispersión de un pueblo o de una comunidad humana por diver- sos lugares del mundo. El término es- taba vinculada a la dispersión de los judíos fuera de Israel, la cual se desa- rrolló en diferentes épocas históricas, como por ejemplo el exilio a Babilo- nia que tuvo lugar en el siglo VI antes de Cristo. Actualmente podemos ha- blar de diáspora venezolana para alu- dir al movimiento migratorio de vene- zolanos a Colombia y otros países, que corresponde a la dispersión de la co- munidad venezolana. Las parroquias de hispanohablan- tes se ubican en las ciudades en el oes- te de los Países Bajos: Ámsterdam, Den Haag y Rotterdam, que pertene- cen a lo que llamamos “randstad”, un área de gran urbanización en la parte suroeste del país. El equipo pastoral de Ámsterdam, o mejor decir del norte del país, no solo atiende a los migran- tes hispanohablantes que viven en la ciudad de Ámsterdam y cercanías, si- no también a los que viven en lugares dispersos, por ejemplo en los pueblos pequeños. La labor pastoral en esos lu- gares de diáspora se realiza tanto a ni- vel personal como a nivel comunita- rio. Hoy día se encuentran hispanos en todos los rincones del país. Las comunidades en la diáspora En el norte del país, parte que lla- mamos también ‘al norte de los ríos’, se han formado tres comunidades la- tinas, que son atendidas pastoralmen- Los migrantes que viven su fe en la diáspora reforzar el ánimo de seguir su camino como peregrinos Las comunidades de fieles de inmigrantes se ubican generalmen- te en las grandes ciudades, pero también hay migrantes que por la distancia no tienen la oportunidad de asistir todos los domin- gos a la celebración dominical en su lengua natal. Son los que vi- ven su fe en la diáspora. Toos Beentjes . Amsterdam