Ventana Europea | Nº 113 Marzode 2018

VENTANA EUROPEA 5 Marzo 2018 cepa, fue el anterior dele- gado nacional ya regresa- do a España que ha sido distinguido por su trabajo pastoral, cultural y social hacia los emigrantes es- pañoles en Alemania, país en el que a lo largo de 48 años ha impulsado inicia- tivas sociales, educativas y pastorales para facilitar su integración. Nos recordaba recientemente que lo que se pretendía era “resaltar la visión humana, cristia- na y de futuro de la Iglesia alemana y española ante el reto de la emigración”. “El emigrante –nos dijo– traí- do y tratado como mano de obra para la industria, fue considerado y tratado co- mo persona con derechos y deberes por la Iglesia ca- tólica desde el primer mo- mento”. Por eso, “el traba- jo de las Misiones ha sido pastoral, social, intercul- tural e interreligioso. Para que se formen como cris- tianos adultos con expe- riencia comunitaria de su fe y sean miembros activos de la comunidad y compro- metidos con la sociedad en la que viven apoyando y defendiendo los derechos humanos de los más débi- les y promoviendo los va- lores democráticos”. En esta misma línea de apoyo a la vulnerabilidad se expresa su sucesor el sacer- dote mejicano Raúl Herrera, trabajando ahora en una sa- na conjunción entre migran- tes españoles y los de otras nacionalidades de lengua española. “La vocación cris- tiana, en el mundo actual, nos dice, no puede vivirse al margen de los que son los pobres entre los pobres, pa- ra utilizar una bien lograda expresión de la instrucción pastoral Iglesia servidora de los pobres de la CEE”. “Mi trabajo con nuestras comunidades cristianas en la emigración en Alemania es para que puedan ser, empe- zando por los sacerdotes or- denados, casas de misericor- dia, en las que la sempiterna opción preferencial por los pobres tenga como princi- pales referentes el nuevo te- soro de la Iglesia: los pobres entre los pobres (emigran- tes, asilados, itinerantes...). Porque vivir el cristianismo con los pobres católicos, en su mayoría del tercer mun- do, en un país del primer mundo (Alemania) es nues- tra vocación en la Iglesia ca- tólica... Opción preferencial por los pobres del cuarto mundo. En una Iglesia en salida, hoy por hoy, los fie- les no son asiduos en sus prácticas sacramentales. Y por eso pretendo ser y com- partir yo mismo el estado migrante para asimilarnos al proyecto de Dios que emi- gra de sí mismo en la encar- nación. En otros términos, debe estar en constante des- localización”. diversas fases El proceso de las Mi- siones comienza en un pri- mer momento en los años cincuenta donde junto con las Iglesias locales pres- tan asistencia y acompa- ñamiento a emigrantes es- pañoles con la ayuda de Cáritas locales. Pronto se generaliza la creación de las Misiones Católicas Es- pañolas que desde un prin- cipio juegan un papel deter- minante en la creación de un espacio social, religio- so y cultural homogéneo en el cual los emigrantes espa- ñoles pueden participar e identificarse. En una segunda fase ya no solo se trata acoger al trabajador emigrante sino a la familia que les acompa- ña. Se crean escuelas e ins- tituciones educativas cuya meta es mantener el lazo lingüístico y cultural de los hijos con España. Empieza la Misión Católica Españo- la en París (1914) dirigida por los claretianos, en los años setenta con clases de lengua y cultura españolas para los hijos de emigran- tes. Los años 70 marcan el asentamiento y la consoli- dación de las Misiones. Se multiplican las comunida- des españolas. En Francia en 1975 llegaron a ser 90 misioneros. En Alemania, actualmente hay 33 misio- nes atendidas por 40 perso- nas (sacerdotes, asistentes pastorales, etc.) y en Suiza 18 misiones con 20 sacer- dotes. Carlos Tobes, misio- nero claretiano, sabe muy bien de los más de cien años de historia de la mi- sión de Rue de la Pompe: “Cien años de actividad y < “El emigrante, traído y tratado como mano de obra para la industria, fue considerado y tratado como persona con derechos y deberes por la Iglesia católica desde el primer momento”. (José Antonio Arzoz) >