Asociación Hispano-Belga de Bruselas

Las actividades con los emigrantes españoles en Bruselas, especialmente con los mayores, sigue siendo de lo más positivo. La asociación Hispano-Belga reune una vez a la semana a los mayores para que, fundamentalmente, se encuentren y compartan algo de su vida: practican gimnasia, tienen una coral, clases de informática, excursiones…

 
Hablar de Bruselas hoy en día es hablar de la actualidad europea, de sus instituciones y de un gran número de organizaciones internacionales. Pero existe una realidad muy diferente y es la de aquellos españoles que, entre los años 50 y 70, dejaron todo lo que tenían para comenzar, una nueva vida en esta misma ciudad que parecía ofrecerles mejores oportunidades laborales y sociales. La mayoría son mujeres y sus edades actuales rodan entre los 70 y 90 años. Oirlas hablar es como abrir un libro de historia lleno de anécdotas y experiencias.
La Asociación Hispano- Belga, creada en 1964 con el fin de promover la integración y fomentar la colaboración entre los ciudadanos belgas y las personas de origen inmigrante, ofrece a estas personas un espacio en el que se encuentran, dos veces por semana, con sus compatriotas, para hacer sus días más llevaderos, y  reafirmar su autonomía personal, desarrollar las relaciones de grupo, y facilitar así la integración al medio que les rodea. Estas reuniones semanales son momentos de gran valor para ellos dado que muchos, viudos y con sus hijos ya mayores, se han visto de pronto solos en un país que los acogió pero que no terminan de ver como suyo.
La planificación de las actividades son estudiadas por un grupo de trabajo, compuesto por voluntarios capacitados, por su curriculum o su trayectoria personal, para efectuar dichas actividades. Destacaremos la gimnasia, la coral, el teatro, los juegos de mesa, la alfabetización, las clases de informática, excursiones, etc. Las actividades “intelectuales” no van dirigidas especialmente hacia la búsqueda de la promoción social, sino encaminadas a favorecer la a veces inexistente autoestima. En este sentido, la exportación a otras asociaciones y residencias de ancianos de las actividades de la coral, el teatro y el baile, dan a éstas personas un sentimiento de orgullo pues al llevar a los otros calor, compañía y alegría, se sienten agentes portadores que transmiten a los otros parte de lo que ellos reciben. Sienten que juegan un papel activo y positivo en la sociedad.
CLASE DE INFORMÁTICA
La enseñanza de ciertas nociones de informàtica y de familiarización con internet se han visto favorecidas gracias a los 16 ordenadores donados por la Representación Española de la Comunidad Europea. Algunos de los asistentes ya tienen nociones y chatean con sus hijos y familiares y otros quieren descubrir ese mundo para ellos desconocido. Y a pesar de que varios de ellos tienen problemas con la ortografía, pues las “h” tienen tendencia a perderse y las “b” y las “v” quieren mezclarse en signo de solidaridad, ponen tanta voluntad y entusiasmo que los voluntarios han decido crear dos grupos: uno para los principiantes y otro para los ya iniciados. Las clases se complican. Los que más se ponen de uñas son los principiantes, con los que hay que insistir para que, a regañadientes, dejen al sitio a los otros.
Es importante señalar que Hispano-Belga trabaja en estrecha colaboración con el Servicio Social del Ayuntamiento de Saint-Gilles y que sus responsables son invitadas a las reuniones mensuales del Servicio Social del Ayuntamiento y sus actividades son valoradas positivamente como medio de integración y de animación a la vida de la comunidad.

Congreso “Hacia la curación y la renovación”

Al igual que los Estados Unidos, Alemania, o Irlanda, la Iglesia católica belga se ha visto salpicada por escándalos de pedofilia. Concretamente, el obispo de brujas, Mgr. Vangheluwe, confesó publicamente actos de pedofilia. Después, muchas lenguas se desataron, denunciando actos contra la moral en diferentes ciudades belgas. Un gran número de éstos hechos han prescrito hoy día, pero los obispos belgas han reconocido su “responsabilidad moral” y se han comprometido a indemnizar a las víctimas y a seleccionar mejor los futuros sacerdotes.
En este sentido, la Iglesia católica belga realizará exámenes psicológicos a los seminaristas que aspiren al sacerdocio así como la elaboración de un código para prevenir los abusos hacia los niños, que será publicado próximamente y aplicará a la regla las consignas dadas por el Vaticano, quien recomienda estos tests a la entrada del seminario. De esta forma, el perfil psicológico de los seminaristas será estudiado desde el principio de su formación y serán objeto de un seguimiento a través de sesiones especiales en compañía de psicólogos. Así lo  ha explicado Mgr. Leonard, en su declaración a la TV, añadiendo que “La Iglesia debe proteger mejor a los niños”. El objetivo es claro: evitar al máximo que pedófilos se incorporen a la Iglesia y poner fin a los escándalos que la salpican y evitar que estos se vuelvan a producir.
No solo la Iglesia belga, sino la Iglesia católica en su totalidad es clara en cuanto a la necesidad de luchar contra la pedofilia en su seno. Esta lucha es de actualidad candente en las Iglesias de America del Norte y en Europa pero la toma de conciencia es ya completa en America Latina y está abriéndose paso en Asia y en Africa.
Con la organización en febrero 2012, de un Symposium, la Iglesia quiere aportar una respuesta global al problema de la pedofilia. “La Iglesia Católica”, explica Monseñor Charles Scicluna, encargado por el Vaticano de instruir los dossiers de pedofilia, “ha decidido mirar la verdad cara a cara”, y el rector de la Gregoriana, el padre Francisco Javier Dumortier, en su declaracion a Radio Vaticano dijo que: “Es una responsabilidad principal  el afrontar esta herida abierta en la Iglesia con los ojos abiertos”.
En el simposio titulado “Hacia la curación y la renovación”, los organizadores propusieron talleres de trabajo en varios idiomas y ponencias sobre las experiencias que han tenido éxito en cuanto a la acogida, escucha y curación de las víctimas.
Este histórico congreso para mejorar la prevención y coordinar la respuesta contra los abusos sexuales a menores y personas vulnerables dentro de la Iglesia se celebró del 6 al 9 de febrero, en la Pontificia Universidad Gregoriana, de Roma, y participaron representantes de 110 Conferencias Episcopales y de 30 congregaciones religiosas de todo el mundo. Se clausuró con la presentación de un Centro de formación a distancia, adscrito a la Universidad Gregoriana, que funcionará desde Munich, para contribuir a atajar la lacra de los abusos. «Si la Iglesia actúa de forma proactiva para implantar y aplicar de manera eficaz de protección de menores a nivel mundial, se convertirá en lo que está llamada a ser: una autoridad líder en el mundo en la promoción del bienestar y seguridad de los niños», había dicho un obispo de Estados Unidos, monseñor Stephen J. Rossetti, poniendo palabras a un sentimiento generalizado entre los ponentes
Para compartir los mejores métodos, la Iglesia ha creado el sitio internet E-learning, destinado a los obispos y reponsables religiosos del mundo entero y que agrupa las últimas novedades en cuanto a la lucha contra la pedofilia. «Queremos mostrar los métodos experimentados en otras partes del mundo, lo que en Inglés se llama»best practices», ha explicado el jesuita Hans Zollner, director del prestigioso Instituto de Psicología de la Universidad Gregoriana de Roma, uno de los promotores de éste proyecto. Según el Vaticano, la Conferencia fue «un paso, ni el primero ni el último, de un camino largo y doloroso» y el Centro E-Learning será la prologación que permitirá a los responsables de la Iglesia obtener y contrastar diferentes métodos utilizados en diferentes países y con diferentes culturas.